El es Murcia.

He leído como muchos hablan de como ella es Madrid. Y yo vengo aquí a hablar de quien es Murcia, y no es ella.
Murcia es ese paseo de la estación de autobuses hasta un fuerte abrazo cerca del corte ingles. Murcia es quien coge mi mano por la inmensidad de gran vía. Murcia es esa sonrisa que veo cada viernes de tasca en tasca, hasta que empiezo a ver poco, cosas del alcohol me dijeron. Murcia es aquel con el que viajo de tranvía en tranvía. Por el que pocos serán los tickets de bus que tenga. Murcia son esos momentos en el malecón sentados viendo el tiempo pasar, pero pocas estaciones para las que nos quedan. Murcia es verlo mirar los patos en el puente de los peligros al atardecer y hacer todas las fotos que pueda.
Murcia, que bonita es Murcia. Y no sabéis que suerte tengo de poder raptarla los viernes y poder decir que es toda mía.
El es Murcia.